Lo que voy a contarles a continuación es un breve ejemplo de lo que uno debe hacer cuando realmente desea algo, al final eres tú, tus decisiones pueden afectar a otros pero recuerda que es mejor hacerlo y equivocarte a que no hacerlo nunca. Espero que no sea mi último viaje a Cuzco, es más deseo cumplirle el deseo a Yanet de venir a esta ciudad a tomarnos un par de tragos en un happy hour de cualquier bar que hay por aquí, disfrutar del paisaje, la noche cosmopolita de miles de turistas, del descanso de un buen hotel y obviamente disfrutar de una noche romántica. Sin embargo aún estoy inquieto. Llegue esta mañana a las 8 y 39 al aeropuerto para reservar mi vuelo, mientras esperaba en el counter de Avianca, me tocó mi turno y no pudieron adelantarme el vuelo, por lo cual tenía un par de horas para disfrutar esta ciudad, solito. Pude haber cogido un taxí como cualquier turista, aunque según las Naciones Unidas no reconocen a un turista cuando este esta de paso menos de 24...
Para los que se sientan en la vereda a meditar..